Operación de la policía española contra grupo ecologista acusado de "estructura criminal"
Ecologistas en el punto de mira policial. Más de dos decenas de personas han sido arrestadas en diversos puntos de España este viernes 12 de enero en una operación contra Futuro Vegetal, grupo al que la policía considera "una estructura criminal" causante de cuantiosos daños.
Futuro Vegetal protagoniza desde hace un tiempo acciones no violentas pero muy drásticas: cortes de carreteras (trataron de parar la Vuelta Ciclista a España), pegar las manos a los marcos de dos cuadros de Goya en el museo del Prado, tratar de amarrarse al atril de la sede del parlamento español...
También se les acusa, según recoge El País, de estar implicados en la acción en la que se lanzó pintura contra la fachada del Congreso de los Diputados, sede el parlamento español.
En su página web, Futuro Vegetal se define como "un colectivo de desobediencia civil no violenta que exige al Gobierno derivar las subvenciones a la ganadería para fomentar alternativas social y ecológicamente responsables". Sus colores coinciden con los tradicionales del anarquismo: el rojo y el negro.
Según el diario El Mundo, la policía acusa a Futuro Vegetal de haber provocado daños con sus acciones valorados en 500.000 euros.
En la información que la policía ha distribuido a los medios se habla de una organización muy organizada, con muchos seguidores y líderes que reciben el nombre de "dinamizadores" y ejercen la coordinación de las acciones.
Arrojar grandes cantidades de pintura contra "objetivos" seleccionados por lo que representan (edificios oficiales, establecimientos comerciales, etc) es el modo habitual de actuar de Futuro Vegetal.
En su cuenta de Twitter hay numerosas imágenes con las que Futuro Vegetal denuncia la represión policial y las injusticias de un sistema que pretenden cambiar radicalmente.
Entre las movilizaciones que promueven las hay muy diversas, pero siempre defendiendo la naturaleza y a los seres vivos que en ella moran.
Lo cierto es que esta operación policial, con 22 arrestados en ciudades de toda España, tiene la apariencia de las acciones policiales a gran escala que suelen hacerse contra grupos terroristas o bandas criminales de delincuencia común. Resulta llamativo si tenemos en cuenta que Futuro Vegetal, de momento, sólo tenía en su haber acciones de protesta pacífica.
Será la justicia quien tenga que pronunciarse sobre si Futuro Vegetal es una organización criminal (y, por tanto, hay que desmantelarla) y si sus militantes merecen la cárcel por sus protestas.
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