El Monte Everest no para de crecer y la ciencia parece haber descubierto el porqué
El monte Everest no necesita presentación. Con más de 8.850 metros (29.035 pies), esta montaña del Himalaya es el punto más alto del planeta Tierra.
Llamado Chomolungma en tibetano, que significa “Diosa Madre del Mundo”, el Monte Everest no sólo tiene un significado cultural y natural, sino que también guarda muchos misterios.
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La revista estadounidense Smithsonian Magazine escribe que, durante casi noventa milenios, el Monte Everest ha ido creciendo cada vez más.
No sólo eso, sino que el Monte Everest se está volviendo más alto de lo esperado y los científicos parece haber descubierto la extraña razón detrás de este fenómeno.
La revista Smithsonian explica que el secreto del Everest reside en la unión de dos ríos cercanos. Aunque normalmente provocan erosión, al arrastrar rocas de una cordillera, es posible que el agua haya provocado el efecto contrario en la corteza terrestre.
El New York Times destaca que la erosión del río permitió que la corteza ligera flotara con mayor facilidad sobre el manto subyacente, manteniéndose a flote. Los científicos han comparado este fenómeno como si el Himalaya estuviera sobre un colchón inflable.
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“Aunque las montañas puedan parecer inmóviles desde la perspectiva de una vida humana, de hecho están en constante movimiento”, dijo Jin-Gen Dai, geocientífico de la Universidad de Geociencias de China en Beijing, a The New York Times.
El New York Times explica que cuando la corteza no se hunde ni se eleva se dice que está en “equilibrio isostático”. Ese es el estado ideal para el Everest, sin embargo, la presencia del río podría haber provocado un desequilibrio que favoreciera un crecimiento lento pero constante.
Según la revista The Smithsonian Magazine, este fenómeno se llama “rebote isostático” y desde hace 89.000 años añade un par de milímetros al Monte Everest.
El equipo detrás del estudio ha descubierto que algunas de las montañas más altas del Himalaya, como el Lhotse y el Makalu (en la foto), pueden agradecer su asombrosa altura a un proceso natural similar al del Everest.
Sin embargo, The New York Times afirma que el Everest y otras montañas similares no crecerán eternamente y que la balanza podría inclinarse en sentido contrario, haciendo que el punto más alto de nuestro planeta se vaya haciendo cada vez más pequeño.