China comienza a prepararse para el fin del mundo
China ha iniciado la implementación de pruebas exhaustivas en sus sistemas de comunicación, empleando simulaciones de escenarios apocalípticos. Esta acción preventiva responde a posibles crisis globales y se produce en un contexto de crecientes tensiones nucleares.
El aumento de las amenazas nucleares y los desastres naturales ha impulsado a China a fortalecer su infraestructura de comunicación. Paralelamente, la comunidad científica continúa investigando los límites del universo en busca de respuestas sobre el destino final de la humanidad.
Antes de su fallecimiento en 2018, el físico Stephen Hawking advirtió sobre un posible fin de la Tierra hacia el año 2600, cuando podría convertirse en "una gigantesca bola de fuego". En el documental "La búsqueda de una nueva Tierra", Hawking señaló el calentamiento global, el cambio climático y el efecto invernadero como causas principales de esta amenaza.
La comunidad científica, como el CERN que explora los límites del universo y plantea preguntas fundamentales sobre su destino. Uno de los experimentos más ambiciosos busca simular el fin del universo, con el objetivo de descubrir si podremos presenciarlo. Este estudio promete ofrecer valiosa información sobre el destino final de todo lo que conocemos, según Andro4Cill.
Investigadores chinos han sometido hardware de enlaces de datos a condiciones extremas para evaluar su resistencia, según informó el South China Morning Post. Estas pruebas no solo superaron los estándares militares existentes, sino que reflejan el compromiso de China con la robustez de sus sistemas de comunicación en situaciones críticas.
Las simulaciones incluyeron escenarios como explosiones nucleares en la estratosfera, conocidas como ataques de pulso electromagnético (HEMP). Este enfoque tiene como objetivo garantizar que las comunicaciones críticas de China se mantengan operativas incluso en caso de un ataque nuclear, reforzando su capacidad de respuesta en situaciones de máxima tensión.
Las predicciones de Stephen Hawking sobre el fin de la humanidad
Científicos chinos elevaron los estándares de protección HEMP (Pulso Electromagnético de Gran Altitud), sometiendo sus equipos a 80 kilovoltios por metro, superando las normas habituales de 50 kilovoltios en China y EE. UU. para simular un ataque nuclear, según Interesting Engineering. Los resultados mostraron que, tras una breve interrupción, los sistemas de comunicación permanecieron operativos, demostrando una notable resistencia ante condiciones extremas.
China está reforzando su capacidad de respuesta ante emergencias mediante inversiones en tecnologías avanzadas.
También impulsa el desarrollo de sistemas de comunicación cuántica y refuerza el hardware militar, con el objetivo de fortalecer su infraestructura ante posibles crisis y garantizar la resistencia de sus sistemas estratégicos.
En un mundo cada vez más incierto, es crucial observar cómo estas iniciativas impactarán no solo a China, sino también al equilibrio global en un mundo interconectado y vulnerable ante diversas crisis. En la imagen, el edificio de oficinas de China Satellite Networks Group Co.