Conflicto entre España y Francia ante el aumento de la inmigración irregular

España está cada vez más preocupada por la posibilidad de que Francia incremente las medidas de control en la frontera con el fin de frenar el flujo de inmigrantes irregulares que cruzan a su territorio.

Las comunidades autónomas de España más afectadas son el País Vasco y Cataluña. En el caso vasco, los agentes franceses siguen haciendo los controles en la localidad francesa de Hendaya, limítrofe con Hondarribia e Irún, ambas en Gipuzkoa.

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La mano dura en materia de inmigración que quiere imponer Francia está en consonancia con lo que están haciendo varios socios europeos. El discurso que recorre Europa contra el flujo de migrantes no solo se ve en Italia con Georgia Meloni, hasta el canciller alemán Olaf Scholz quiere endurecer los controles fronterizos.

La cuestión es que Francia y España son vecinos, por lo que cualquier movimiento del país galo afecta directamente a España. El Gobierno de Sánchez ve viable que el ministro del Interior francés multiplique las devoluciones en caliente en la frontera.

Las devoluciones en caliente consisten en expulsar a los migrantes sin que dispongan de un proceso con garantías que permita saber si necesitan protección internacional. Se teme que esa sea la idea del ministro del Interior francés, Bruno Retailleau, del ala dura de la derecha francesa, que ha conservado su puesto en el nuevo Gobierno.

El nombramiento de Retailleau fue un guiño a Marine Le Pen, líder de la ultraderecha. Al entregar la cartera responsable de la seguridad y la inmigración a un miembro del ala dura, podría acorralar el discurso de Le Pen y no perder votos.

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“Mi convicción está clara y desde hace mucho tiempo: la inmigración, cuando no está controlada, no es una oportunidad para nadie; ni para Francia, ni para los inmigrantes. El verdadero problema es el número. Demasiado es demasiado”, ha declarado el ministro del Interior francés, según El País.

Francia ha suspendido la libertad de movimiento en el espacio Schengen que comparten los países europeos en varias ocasiones: tras los atentados de París en 2015 y durante los Juegos Olímpicos celebrados este verano ante el miedo de posibles atentados.

El Gobierno vasco liderado por Imanol Pradales ha pedido ayuda a Sánchez ante la gran presión migratoria que vive Euskadi y, en una propuesta conjunta con Canarias, solicitó que el País Vasco se considere Frontera Norte del Estado. Además de pedir una mayor dotación económica para atender a todos los migrantes, según Eldiario.es.

El nuevo curso político en Francia no podrá olvidar la sentencia del Tribunal de Justicia de la UE, que advirtió a Francia que los controles fronterizos excusados en el terrorismo no pueden usarse para acelerar las devoluciones de inmigrantes ilegales, como ocurre con los cientos que Francia envía a España cada mes.

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