Stallone y otros dos veteranos del cine serán los 'embajadores especiales' de Trump en Hollywood
En un anuncio sin precedentes, Donald Trump designó a Mel Gibson, Sylvester Stallone y Jon Voight como “embajadores especiales" a Hollywood. Trump declaró que el objetivo es fortalecer la industria cinematográfica estadounidense. La decisión ha desatado sorpresa, escepticismo y controversia, generando debates sobre la interacción entre política y cine.
Donald Trump busca revivir una "Edad de Oro" del cine estadounidense y afirmó, según Euronews: "Me servirán como enviados especiales con el objetivo de recuperar Hollywood, que ha perdido muchos negocios en los últimos cuatro años a favor de países extranjeros, ¡más grande, mejor y más fuerte que nunca!"
La decisión de Trump llega en un momento crítico para Hollywood, con una caída en la producción desde 2021, debido al impacto de la pandemia y las huelgas de guionistas y actores de 2023, según indica Euronews. Además, la industria enfrenta competencia de plataformas de streaming y la migración de producciones hacia países con mejores incentivos fiscales.
Según ProdPro, la producción audiovisual en el país ha caído un 26% desde 2021. En el área metropolitana de Los Ángeles, las cifras de FilmLA muestran una disminución del 5,6% en comparación con 2023, alcanzando su nivel más bajo desde 2020.
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Aunque figuras de Hollywood como Viola Davis y Leonardo DiCaprio (en la imagen) respaldaron a Kamala Harris, Trump ha conseguido también un notable respaldo del mundo del entretenimiento en comparación con campañas anteriores. Actores como Dennis Quaid y Roseanne Barr, junto con músicos como Carrie Underwood y los Village People, se suman a su causa, marcando un contraste con la escasez de figuras destacadas en 2017, según Forbes.
Mientras algunos sectores conservadores respaldan la medida, otros critican la elección de figuras polémicas como Mel Gibson y alertan sobre posibles interferencias políticas en la creación artística. El debate se centra en la libertad creativa, el riesgo de censura y el impacto real que estos enviados podrían tener en la industria cinematográfica.
Los enviados especiales de Trump no destacan por sus habilidades diplomáticas, sino por su lealtad o su capacidad de provocar. Stallone y Voight, dos de los pocos defensores abiertos de Trump en Hollywood, representan el primer caso. Mel Gibson, en cambio, parece ser un gesto provocador hacia la industria, que lo marginó durante años por comentarios racistas y antisemitas. Aunque Gibson ha retomado su carrera, sigue siendo una figura polémica, según Variety.
A sus 69 años, Mel Gibson sigue acaparando titulares. Desde su debut como 'Mad Max' en 1979 hasta su éxito en 'Braveheart', ganadora de cinco Oscar, su carrera ha estado llena de hitos. Sin embargo, también ha protagonizado controversias, como sus comentarios antisemitas y la polémica en torno a la película, 'La Pasión de Cristo'.
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Mel Gibson, quien perdió su casa en el incendio de Palisades, emitió un comunicado asegurando que se enteró de su designación "al mismo tiempo que todos vosotros y con igual sorpresa. Sin embargo, he respondido al llamado. Mi deber como ciudadano es ofrecer toda la ayuda y los consejos que pueda". Con su característico sentido del humor, añadió: "¿Existe la posibilidad de que el cargo venga con una residencia de embajador?”, según Euronews.
Famoso por sus papeles en 'Rocky' y 'Rambo', Sylvester Stallone mantiene una estrecha relación con Donald Trump, a quien ha llegado a describir como el "segundo George Washington”, según EFE.
Su experiencia en producción y dirección podría ser fundamental para promover las películas "patrióticas" que Trump desea impulsar, lo que podría influir significativamente en el contenido que se genera en Hollywood.
Jon Voight, actor de 86 años y conocido por su postura conservadora, ha sido un firme aliado de Trump durante años. En una ocasión, llegó a calificarlo como "el mejor presidente desde Abraham Lincoln”, según Fox News.
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Ganador del Oscar y estrella de 'Cowboy de Medianoche' y 'El Regres', en 2019, recibió la Medalla Nacional de las Artes, el mayor galardón artístico de EE.UU., otorgado por el entonces presidente. Durante su mandato, Voight respaldó públicamente a Trump con vídeos y declaraciones, elogiándole como el líder ideal mientras criticaba a los demócratas, según Infobae.com.
BBC News informo que Lucas Shaw, veterano analista de Hollywood, duda que los nuevos enviados puedan ofrecer soluciones significativas a los problemas de la industria."Trump los percibe como aliados para hablar de cambios en Hollywood, pero no creo que John Voight, Sylvester Stallone y Mel Gibson vayan a dedicarse a resolver problemas como revivir el modelo de televisión por cable, hacer que el streaming sea más rentable o lograr que China importe más películas de Hollywood", afirmó Shaw.
Medios europeos cubriendo las implicaciones para la política exterior estadounidense y la industria cinematográfica global opinan que existen preocupaciones sobre cómo esta decisión podría impactar las coproducciones internacionales y la influencia cultural de Estados Unidos. Gobiernos y organismos culturales extranjeros han expresado inquietudes sobre las repercusiones en festivales de cine internacionales y la diversidad del cine global.
Mientras algunos ven oportunidades para revitalizar la producción nacional, otros temen por la integridad artística y la diversidad del cine estadounidense. El futuro de la industria dependerá de cómo equilibre las presiones gubernamentales con la necesidad de innovación creativa y relevancia global. La vigilancia y defensa de la libertad artística serán esenciales para preservar el cine como medio de expresión cultural y reflexión social.