Polémico y provocador hasta su último aliento: retrospectiva a Jean-Marie Le Pen

Jean-Marie Le Pen, el que fuera líder del Frente Nacional de Francia, es quizá uno de los políticos franceses más controvertidos. La suya es una de las trayectorias más cuestionadas de la quinta república francesa. Ahora, con 96 años ya cumplidos, toca repasar qué ha sido de su vida.

Le Pen nació el 20 de junio de 1928 en La Trinité-sur-Mer, un pequeño puerto de la región de Bretaña. Su padre, que era pescador, murió en el mar en el año 1942, por lo que ex que sería futuro líder del Frente Nacional francés quedó huérfano con 14 años.

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Esa misma década, la de los años cuarenta, Le Pen se trasladó a París para estudiar Ciencias Políticas y Derecho. Durante esa etapa de su vida se convirtió en presidente de la asociación de estudiantes de su facultad, destacando por sus cualidades como orador. Fue una época en la que Le Pen se hizo amigo además de Claude Chabrol, quien años más tarde acabaría siendo uno de los más conocidos directores de la historia del cine francés y el último superviviente de la 'Nouvelle Vague'.

Cercano a los círculos de extrema derecha francesa, Jean-Marie Le Pen se unió a la Union de Défense des Commerçants et Artisans de France (UDCA), una formación liderada por Pierre Poujade que logró un gran resultado en las elecciones de 1956 obteniendo 52 escaños en la Asamblea Nacional. Uno de ellos sería precisamente para el propio Le Pen, que se convirtió en diputado con solo 27 años.

Veterano de la guerra de Indochina, Le Pen se unió al ejército francés en Argelia durante unos meses a pesar de su condición de diputado. Formó parte de un regimiento de paracaidistas y se le considera sospechoso de haber realizado torturas durante su etapa allí, tal y como informaron en los años ochenta Le Canard enchaîné y Libération. Es una acusación que él mismo siempre ha negado.

Jean-Marie Le Pen se ha casado en dos ocasiones con Pierrette Lalanne y con Jeanne-Marie Paschos. Pero fue solo con la primera de ellas con quien ha tenido descendencia, concretamente tres hijas: Marie-Caroline, Yann y Marine, esta última bien conocida por ser la actual presidenta de la Agrupación Nacional -nombre actual del Frente Nacional- bajo cuyas siglas participará por tercera vez en unas elecciones a la presidencia de Francia.

Le Pen se consolidó poco a poco como el gran referente y líder de los movimientos de extrema derecha en Francia, que por aquella época no caminaban juntos remando en una misma dirección y con un objetivo común. Así, en 1972 asumió la dirección del Frente Nacional, partido que acababa de crearse para unir a todas esas corrientes radicales que existían en el país.

Solo dos años después, en 1974, Jean-Marie Le Pen se convirtió en candidato a la presidencia de Francia por primera vez. En los comicios que se celebraron entonces obtuvo un apoyo del 0,75% y pidió el voto en segunda vuelta para el que finalmente sería presidente: Valéry Giscard d'Estaing.

El final de la década de 1970, la vida de Le Pen estuvo marcada por la violencia. En 1976, su apartamento de París fue destruido por una bomba que contenía veinte kilos de explosivos y, dos años después, en 1978, su mano derecha, François Duprat, murió en un atentado con coche bomba.

Fue también una época en la que la vida de Le Pen cambió para siempre de la mano de uno de sus seguidores, Hubert Lambert. El heredero de la empresa Cementos Lambert, un hombre enfermizo y extravagante, falleció sin hijos a los 42 años dejando a Le Pen toda su fortuna en 1977, incluyendo el castillo de Montretout, una controvertida herencia que permitió también al líder del Frente Nacional una mayor independencia económica para llevar a cabo sus actividades políticas.

Le Pen no se presentó a las elecciones presidenciales de 1981, pero fue en ese momento cuando el Frente Nacional cosechó en las urnas sus mejores resultados. Durante las elecciones cantonales de 1982, el Frente Nacional logró más del 10% de los votos en algunos territorios del país y, al año siguiente, obtuvo el 16% en los las municipales parciales de Dreux: la lista de su partido se fusionó con la de la derecha y ganó en la segunda vuelta.

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Jean-Marie Le Pen aparecía cada vez con más frecuencia en los medios de comunicación, gracias también a que al presidente François Mitterrand le interesaba para desviar la atención del electorado de derecha y restarle apoyos al centroderecha, algo que quedó patente en 1984 con su participación en el programa sobre política 'La hora de la verdad'.

En las elecciones legislativas de 1986, Le Pen volvió a la Asamblea Nacional cuando se cumplían treinta años de la primera vez que resultó elegido diputado. Su partido obtuvo entonces una cifra récord de 35 escaños.

Al año siguiente, Pierrette Lalanne, con quien tuvo un divorcio muy sonado, se quiso vengar de Jean-Marie Le Pen haciendo un posado para una conocida publicación para mayores de edad con la idea de avergonzarlo en el contexto de las elecciones presidenciales de 1988. Las tres hijas del político francés se pusieron entonces del lado de su padre para defenderlo.

En pleno ascenso político, Jean-Marie Le Pen se representó a sí mismo en esas elecciones de 1988 haciendo una campaña centrada en dos temas: seguridad e inmigración. Con 4,4 millones de votos, lograría un resultado del 14,4%. Pero, a pesar de este espectacular crecimiento, Le Pen vio cómo se desvanecían sus esperanzas de participar en la segunda vuelta.

Los excesos verbales racistas y antisemitas a lo largo de su carrera como político probablemente han privado al líder del Frente Nacional de incrementar sus apoyos entre el electorado francés de derechas. Un buen ejemplo de ello han sido sus continuas e infames declaraciones relativizando las cámaras de gas durante la Segunda Guerra Mundial, a las que ha definido como "un detalle histórico"; o sus comentarios irónicos sobre los orígenes judíos del cantante y actor Patrick Bruel.

La incapacidad -o falta de voluntad de Le Pen- para convertir al Frente Nacional en un partido capaz de gobernar en Francia, empezó a generar dudas e impaciencia entre las otras figuras de la formación como Bruno Mégret (en la foto). A pesar de volver a mejorar una vez más los resultados en las elecciones presidenciales de 1995 (15% de los votos), Mégret provocó una escisión dentro del partido, que, además, caería de forma muy importante en las europeas de 1999.

Sin embargo, el recién creado Movimiento Nacional Republicano de Bruno Mégret acabaría teniendo un peso electoral muy bajo en comparación con el Frente Nacional. En las elecciones presidenciales de 2002, Le Pen obtuvo el gran éxito de su carrera consiguiendo casi el 17% de los votos y clasificándose para la segunda vuelta por delante del primer ministro y candidato socialista Lionel Jospin. Aquello supuso una gran conmoción para la sociedad francesa y, tras importantes manifestaciones contra Le Pen, el presidente saliente, Jacques Chirac, acabaría ganando con un apoyo récord del 82%.

La figura de Jean-Marie Le Pen era rechazada por la gran mayoría de la sociedad francesa a pesar de contar con un electorado muy leal. El líder de la extrema derecha se presentó por última vez en el año 2007, cayendo sus apoyos hasta el 10,4%, un mal resultado sustentado también en el efecto que generó sobre la derecha el candidato Nicolas Sarkozy.

En 2010, ya con 82 años, Jean-Marie Le Pen anunció que no se volvería a presentar como candidato a la presidencia del Frente Nacional y mostró todo el apoyo a su hija Marine ante Bruno Gollnisch en la carrera por sucederle al frente del partido. Finalmente fue ella quien ganó, una buena prueba del peso de la familia Le Pen en este movimiento político.

La relación entre padre e hija se fue deteriorando cada vez más desde el momento en que Marine se puso al frente del partido. Jean-Marie hizo públicos sus desacuerdos con Marine y retoma sus polémicas y sus salidas de tono racistas y antisemitas. Todo ello derivaría en que, en 2015, terminara por ser expulsado del Frente Nacional.

Desde 2019, Jean-Marie Le Pen ya no ha vuelto a ocupar ningún cargo, dando sus últimos pasos como político como eurodiputado. Fue entonces, cuando publicaría sus memorias en dos volúmenes que vieron la luz en los años 2018 y 2019.

A pesar de su avanzada edad y de la ruptura con su hija Marine, Jean-Marie Le Pen sigue siendo protagonista de noticias y tertulias en los medios de comunicación de forma regular. Y que no quepa duda que seguirá siendo una persona polémica y provocadora hasta su último aliento.

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