La estrategia de Sheinbaum: un México fuerte ante las amenazas de Trump
El inicio de año en México está marcado por una intensa agenda de trabajo. La gobernante Claudia Sheinbaum está enfocada en concretar varios asuntos importantes antes del 20 de enero, fecha en la que Donald Trump asumirá nuevamente la presidencia de Estados Unidos para un nuevo mandato.
Como explica El País, la presidenta se enfocará en tres áreas principales: la legalidad de las aduanas, los consulados en territorio estadounidense y el tráfico ilegal de fentanilo.
Históricamente, estos tres sectores son los que más preocupan a las administraciones estadounidenses, independientemente de la orientación política.
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Antes mismo de empezar su segundo mandato, Donald Trump ya dio señales de que quiere adoptar medidas duras contra su vecino del sur.
El magnate amenazó con deportaciones masivas, aranceles de 25% a las importaciones mexicanas y con declarar a los cárteles de drogas organizaciones terroristas.
Las amenazas de Trump también ponen en riesgo el tratado de libre comercio entre México, Estados Unidos y Canadá, el T-MEC. El próximo presidente de Estados Unidos quiere realizar una revisión anticipada del acuerdo.
Claudia Sheinbaum, por su parte, puso las cartas sobre la mesa. Adoptó medidas para arreglar estas cuestiones antes de que Trump llegue a la Casa Blanca, pero dejó claro que México no se someterá a la injerencia de Estados Unidos.
“Nosotros colaboramos, coordinamos, trabajamos juntos, pero nunca nos vamos a subordinar. México es un país libre, soberano, independiente y no aceptamos injerencismo. Es colaboración, es coordinación, pero no es subordinación. Y vamos a ir construyendo la paz”, declaró Sheinbaum, según El País.
Las relaciones estarán lideradas principalmente por el canciller mexicano Juán Ramón de la Fuente quien, en los primeros momentos tras la elección de Trump, ha visitado a los cónsules en Estados Unidos para reforzar la estrategia consular ante posibles deportaciones, según el Los Angeles Times.
Además, México también busca el apoyo de otras naciones en la cuestión de la repatriación de los deportados. "Sí, el canciller Juan Ramón de la Fuente está hablando con algunos otros países cuyos habitantes cruzan el territorio nacional para llegar a la frontera norte", confirmó Sheinbaum, según DW.