La lucha contra la infravivienda en Hong Kong no alcanza a las 'casas ataud'
Vivir en poquísimos metros cuadrados, sin casi poder moverse y sin privacidad. Esa es la realidad de centenas de millares de personas en la altamente poblada ciudad de Hong Kong, que impulsa ahora una reforma inmobiliaria contra la infravivienda que, sin embargo, no afectará a lo que se denomina 'casas ataud' (o 'casas jaula' como la de la imagen).
Según The New York Times, el líder de Hong Kong, John Lee, anunció en octubre que la ciudad impondría estándares mínimos sobre el tamaño y el equipamiento de apartamentos muy pequeños, que en general albergan baños y cocinas en el mismo espacio.
El periódico destaca que aproximadamente 220.000 personas en Hong Kong, entre ellas 40.000 niños, viven en estas casas subdivididas, un ejemplo de la desigualdad social en la ciudad.
Se espera que la política prometida por el líder hongkonés elimine gradualmente más de 30.000 de las casas subdivididas más pequeñas. Sin embargo, las 'casa ataúd', que en general albergan apenas una cama, son consideradas solamente dormitorios y no serán afectadas por las nuevas reglas, según el Hong Kong Free Press.
La orden de arreglar la crisis inmobiliaria vino de arriba. Según The New York Times, Beijing ha instado al gobierno hongkonés a deshacerse de estas microcasas de aquí a 2049, porque considera que la escasez de viviendas en la ciudad es una de las causas de los disturbios antigubernamentales de 2019.
Hong Kong tiene cerca de 7,5 millones de habitantes, pero ya casi no quedan terrenos para construir en la ciudad. Con eso, su mercado inmobiliario se convirtió en el más caro del mundo, según National Geographic.
Sin embargo, el plan de John Lee despertó preocupación entre expertos y defensores de la vivienda pública. Según ellos, la medida podría aumentar aún más los alquileres para las personas más pobres y desalojaría a muchas más, sin tocar el peor tipo de vivienda de la ciudad, las 'casas ataúd'.
En Hong Kong, el espacio habitable medio por persona es de poco más de 6 metros cuadrados, según The New York Times. Los propietarios de apartamentos de alquiler dividen las unidades en espacios más pequeños para alquilarlos a más personas. Son estas casas que el gobierno quiere regular.
De acuerdo con un ejemplo dado por National Geographic, el dueño de un piso de 35 metros cuadrados lo dividió de una manera que pudiera acomodar 20 camas de dos pisos. El precio para alquilar uno de estos espacios es de 200 dólares de Hong Kong al mes, unos 21 euros.
La nueva política impulsada por el ejecutivo de la ciudad exige que los pisos tengan al menos cocina y baño separados (en muchos de estos micro inmuebles estos espacios ocupan el mismo lugar). Pero todavía queda aclarar cómo se llevarán a cabo las remodelaciones necesarias y quién pagará por ellas.