2025 ya está aquí: cómo será el mundo en los próximos meses
En 2025, Donald Trump está programado para realizar un notable regreso a la Casa Blanca. La ceremonia de investidura está fijada para el 20 de enero, lo que se espera tenga repercusiones a nivel mundial.
Si Trump cumple sus promesas, emprenderá una guerra comercial con China que tendrá repercusiones económicas internacionales profundas. Pero habrá que ver hasta qué punto esa guerra comercial se produce: entre sus colaboradores cercanos los hay muy antichinos y los hay, como Elon Musk (que fabrica en China) más partidarios de un diálogo constructivo.
Resulta probable también que en 2025 sea noticia un acercamiento entre Rusia y Estados Unidos. Trump siente simpatía por Putin y ha prometido acabar con la guerra de Ucrania a toda prisa. Y eso puede consistir, sencillamente, en presionar a Zelenski para que firme una paz al gusto de los rusos.
Hay una fuerte corriente dentro del Partido Republicano que quiere cortar en seco la financiación y ayuda de Estados Unidos a Ucrania. Trump es impredecible pero es probable que su política vaya en esa línea. Zelenski, sin el apoyo estadounidense, podría flaquear.
Pero 2025 no sólo será difícil para Zelenski por el probable distanciamiento de Estados Unidos. También tiene problemas internos: la guerra se halla estancada y la población está exhausta y reclutar aún más jóvenes para mandarles al frente puede provocar tensiones sociales que pongan en cuestión al hasta ahora líder incuestionable.
Pero, a la vez, la debilidad de Zelenski y la actitud de Trump pueden propiciar conversaciones de paz entre Rusia y Ucrania y que 2025 ponga fin a una guerra que lleva más de dos años en marcha. Un paz que, seguramente, costará territorio a Ucrania.
2025, previsiblemente, seguirá viendo el avance del populismo de derechas. El 23 de febrero hay elecciones en Alemania y las encuestas pronostican un gran éxito para la extrema derecha germana, que puede convertirse en la segunda fuerza del país, por encima de socialdemócratas y verdes.
En Latinoamérica hay nuevos liderazgos que en 2025 serán puestos a prueba. Es el caso de Claudia Sheinbaum en México. La mandataria tendrá que buscar su propio camino después de la era López Obrador.
En el lado contrario a Sheinbaum se coloca otro líder bajo escrutinio: Javier Milei insiste en que seguirá aplicando la motosierra económica a Argentina. ¿Saldrán bien sus planes o habrá una explosión social? De momento, el país aguantó sus políticas.
Oriente Próximo y Oriente Medio seguirán, previsiblemente, siendo noticia por sus interminables conflictos. La violencia, lamentablemente, continuará de un modo u otro. Incluso con treguas temporales y presuntas victorias que nunca son definitivas.
En 2025 se prestará especial atención a Siria, que entra en territorio desconocido tras la caída de Bacher El Assad, el dictador que durante decenios controló con mano de hierro el país.
Y también resulta tristemente previsible que en 2025 veremos fenómenos meteorológicos extremos más abundantes debido al cambio climático. Y que se producirán ya no sólo en los lugares habituales. Las catástrofes como las lluvias torrenciales que en Valencia, en España, provocaron más de 200 muertos el pasado mes de noviembre demuestran que Europa no es ajena a esta nueva realidad.
Y algo que deseamos que no sea noticia en 2025 es la irrupción de una nueva pandemia. Pero lo ocurrido en 2024 en Estados Unidos con la gripe aviar, que se contagió a varias personas, obliga a los expertos a alertar de que esta es una posibilidad nada descartable.
Sí, sucederá en 2025. Concretamente, según recogía National Geographic, en el mes de marzo. Los anillos de Saturno dejarán de ser visibles desde nuestro planeta. Pero volveremos a divisarlos tras un breve espacio de tiempo. Que nadie se preocupe.
Imagen: NASA
Esperamos, eso sí, que haya inesperadas buenas noticias que hagan de 2025 un año para recordar en positivo. Confiamos en ello porque, a pesar de todo, el mundo puede ser un lugar mejor.