Así es el ejército más fiel de seguidores de Trump
Son muchos. No hay que olvidar que, aunque perdió las elecciones, Donald Trump logró una histórica cifra de 74 millones de votos. Y el núcleo principal del "ejército trumpista" tiene unas características muy concretas. En la imagen, atardecer en Florence (Arizona), donde Donald Trump dio uno de sus últimos discursos.
Siempre se ha destacado la poca diversidad racial que hay en los mítines de Trump. Este hecho resulta casi un tópico (hasta el punto de que en la exitosa serie 'The Good Fight' hay una broma sobre cómo en un gran bufete de abogados de mayoría afroamericana tienen serias dificultades para encontrar un solo votante de Trump entre los suyos). Sin embargo, porcentualmente, en las elecciones de 2020 aumentó el apoyo a Trump entre hombres afroamericanos o latinos. Aunque el Partido Demócrata está muy por delante en el apoyo de las minorías raciales.
A Trump sus enemigos le acusan de machista. Sin embargo, entre sus apoyos cuenta con un nutrido número de mujeres. Según una encuesta de CNN, en las elecciones de 2016 que llevaron al magnate a la Casa Blanca, la mayoría de las mujeres estadounidenses le votaron: un 54%. ¿Todas eran mujeres sin título universitario o del medio rural? No. Siempre según esa encuesta, en 2016 votaron a Trump un 45% de mujeres que habían pasado por la universidad.
Resulta paradójico que Trump haya logrado el apoyo de la América profunda más religiosa. El magnate reconvertido en político es un neoyorquino cuya vida privada no se ha guiado precisamente por los valores conservadores (divorcios, lujo y ostentación...) pero su apuesta por colocarse muy a la derecha en la batalla cultural ha logrado seducir al electorado que profesa una profunda fe cristiana.
Volviendo a los datos de la muy exhaustiva encuesta hecha por CNN tras la victoria de Trump en 2016 (datos que otras encuestas posteriores han confirmado), entre los "trumpistas más entusiastas" están quienes tienen más de 45 años. A partir de esa frontera sus apoyos se disparan. Los jóvenes siguen votando mayoritariamente al Partido Demócrata.
Estados Unidos sobre todas las cosas. En ese culto al patriotismo se basa el éxito de Trump y es uno de los mensajes que enardecen a sus bases.
La teoría de la conspiración sobre un posible fraude electoral que llevó a Biden a la Casa Blanca tiene amplios apoyos entre los más fieles a Trump. Según una encuesta de Politico, el 70% de los votantes del Partido Republicano cree que hubo fraude electoral porque las elecciones "no fueron libres ni justas".
Preservar una forma de ser estadounidense es uno de los elementos fundamentales del discurso conservador que Trump ha fomentado. Y ello incluye cierto nivel de exclusión para algunas formas "heterodoxas" de sentirse parte de Estados Unidos.
Para el ejército de fieles a Trump los símbolos son muy importantes. Es la América en cuyos hogares ondea orgullosa la bandera estadounidense.
Pudo verse en el asalto al Capitolio pero no solamente: en la imagen, un seguidor de Trump acude a un mitin con una chaqueta que luce la bandera confederada, la bandera del sur secesionista que defendía el esclavismo. Una bandera que antes se mostraba sin gran polémica en muchos lugares y ahora está siendo retirada de la esfera pública por sus connotaciones racistas.
Pero a la vez que pueden verse controvertidas banderas sudistas, los partidarios de Trump utilizan todo tipo de iconos de Estados Unidos. A decir de sus detractores, se apropian del país y de símbolos que tendrían que representar a todos los estadounidenses.
Es un hecho que todos los días resulta objeto de artículos y análisis que Estados Unidos está en 2021 más polarizado que nunca. Dos modos de ver el mundo se enfrentan. En uno de esos bandos se sitúan Trump y los suyos, que creen que hay que conservar los valores de antaño.
En la división de voto entre Trump y Biden puede observarse como el demócrata gana ampliamente en zonas urbanas y Trump arrasa en territorios rurales y en eso que suele denominarse "América profunda".
En un mundo que ha cambiado rápidamente, la gente que vota a Trump quiere recuperar una estabilidad, que las cosas no varíen. Se ha escrito a menudo que en las filas del electorado "trumpista" hay un buen número perteneciente a una clase obrera a quien a la Gran Recesión dejó muy hundida (y que no encontró en el progresismo quien la defendiera).
Otro término que se ha usado profusamente a la hora de buscar al elector de Trump es el de "América enfadada". El estadounidense que cree vivir en un país a la deriva, manejado por élites de Washington y Nueva York que no tienen vinculación alguna con las personas normales.
Dentro de ese cosmos conservador está Marjorie Taylor Greene, congresista por Georgia que representa al ala más radical, en sintonía con facciones que defienden teorías de la conspiración. Su historial de controversias ha llevado a que sea vetada en algunas de sus tareas como congresista y expulsada de Twitter.
Quizá lo más preocupante sea la infiltración entre los partidarios de Trump de grupos con parafernalia militar y que exhiben sus armas y cierta actitud violenta en manifestaciones.
El asalto al Capitolio fue el momento culminante en que ese grupo radical y violento de seguidores de Trump lograron protagonismo.
No obstante, la mayoría de los seguidores de Trump se limitan a votar y jalear a su jefe, no a preparar insurrecciones armadas.
Y una característica muy acusada de estos "nuevos republicanos": por encima del partido, adoran a Donald Trump. Y la sospecha en el Partido Republicano es que si Trump se fuese y montase una candidatura independiente, esta masa de votantes se iría con él. Quizá por eso hay poca oposición interna a Trump en las filas republicanas.
Así que parece casi seguro que Trump, si nada lo impide, volverá. Que se presentará a las elecciones. Y las encuestas dicen que su victoria no es una opción disparatada. Claro que todavía queda mucho para 2024, que es cuando tendrían que ser convocadas elecciones en Estados Unidos. Y ya hay otros nombres que suenan como candidatos del Partido Republicano.
ADEMÁS: Tucker Carlson: ¿otra estrella de la televisión camino de la Casa Blanca?