¿El ayuno intermitente realmente duplica el riesgo de muerte cardiovascular?
En los últimos años, el ayuno intermitente se ha promocionado como una popular forma de perder peso pero un estudio reciente ha advertido que puede dañar al corazón. Sin embargo, el estudio ha sido objeto de polémica en el mundo de la nutrición. Analicemos lo que se sabe.
El ayuno intermitente es un término general que se refiere a restringir la alimentación durante períodos de tiempo indefinidos. Sin embargo, lo que se ha vuelto tendencia es limitar las ventanas de alimentación cada día, realizando todas las comidas en sólo 8 horas o menos, para ayunar al menos 16 horas al día.
Según el estudio presentado a la Asociación Estadounidense del Corazón en marzo, las personas que limitan su alimentación diaria a menos de 8 horas al día para ayunar el resto del tiempo, tienen un 91% más de probabilidades de morir de una enfermedad cardiovascular, en comparación con las personas que comen entre 12 y 16 horas.
El estudio consistió en seguir a 20.000 adultos de EE.UU. durante un período de 8 años para descubrir qué sucedía con la salud al restringir los tiempos de alimentación a 8 horas o menos al día.
"Restringir el tiempo de alimentación diario a un período corto, como 8 horas por día, ha ganado popularidad en los últimos años como una forma de perder peso y mejorar la salud del corazón", dijo el autor principal del estudio, Victor Wenze Zhong. "Sin embargo, se desconocen los efectos a largo plazo, incluido el riesgo de muerte por cualquier causa o enfermedad cardiovascular".
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Estudios a corto plazo han demostrado que el ayuno intermitente puede mejorar los indicadores relacionados con la salud del corazón y la longevidad, un dato que dejó a Zhong "sorprendido" al relacionarlo con un aumento en las muertes cardiovasculares.
"Aunque este tipo de dieta ha sido popular debido a sus posibles beneficios a corto plazo, nuestra investigación muestra claramente que, en comparación con un intervalo de tiempo típico para comer de 12 a 16 horas por día, una duración más corta de la comida no se asoció con una vida más larga", dijo Zhong.
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Este estudio ha causado gran revuelo en la comunidad nutricional. Y aunque también ha sido publicado en medios de comunicación como 'Washington Post' y 'New York Times', ha sido objeto de un intenso escrutinio.
Un hecho importante a tener en cuenta es que solo 414 participantes de 20.000 que hacía ayuno intermitente, según 'New York Times'. Además, esas personas también eran, en general, más jóvenes, más propensas a fumar y con menos acceso a alimentos saludables.
El comunicado de prensa del estudio, el resumen y un póster con sus hallazgos, se publicaron en la web de 'American Heart Association', que es una institución médica de reputación contrastada. Sin embargo, los expertos todavía no han tenido la oportunidad de analizar los detalles del estudio para poder juzgarlo adecuadamente.
Otra queja del estudio es que los investigadores se basaron en dos cuestionarios dietéticos para capturar cuándo comían los participantes en el estudio. Si bien los detalles aún no están disponibles, parece que tampoco se analizó qué alimentos comían los participantes.
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La correlación no es causalidad. El cardiólogo Dr. Dariush Mozaffarian dijo a 'New York Times' que el estudio fue “muy problemático” porque muchas de las personas en el grupo de alimentación de 8 horas podrían tener períodos de alimentación restringidos, debido a que estaban muy ocupados o tenían vidas agitadas. Otros expertos sugirieron que puede haber más personas con trastornos alimentarios, enfermedades que reducen el apetito o inseguridad alimentaria.
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Según el Consejo Internacional de Información Alimentaria (IFIC), el ayuno intermitente es más popular que una dieta cetogénica o rica en grasas. La encuesta del IFIC mostró que alrededor del 10% de los estadounidenses de entre 18 y 80 años utilizan el ayuno intermitente como dieta.
Anteriormente, algunos de los estudios a corto plazo sobre limitar la comida a determinadas horas han sido positivos. Estos estudios han entusiasmado a algunos expertos y personas influyentes por centrarse, no tanto en lo que se come, sino en cuándo.
Un estudio que analiza todas las investigaciones anteriores, publicado en 'New England Journal of Medicine', encontró que comer en un período de 6 horas aumentaba la resistencia al estrés, incrementaba la longevidad y disminuía la incidencia de enfermedades, incluidos el cáncer y la obesidad. Otro estudio de 2019 encontró una pérdida de peso promedio del 2,5% al 9,9% del peso corporal.
Otro estudio de 2023, realizado por un equipo de investigadores del 'King's College de Londres', mostró que el ayuno intermitente mejora el hambre, los niveles de energía y el estado de ánimo. En ese estudio estrechamente controlado, pero a corto plazo, 37.000 personas registraron información sobre sus hábitos alimentarios, estado de ánimo y energía.
Sin embargo, diferentes estudios y ensayos clínicos han demostrado que el ayuno intermitente no tiene resultados significativos en cuanto a pérdida de peso.
¿Qué hacer con toda esta información contradictoria? Lo primero es llevar un estilo de vida saludable. Ayuno intermitente o no, que los alimentos que ingieras no sean procesados, que tu dieta sea balanceada y que hagas ejercicio de manera regular. Preguntarle a tu médico su opinión sobre el ayuno intermitente es la recomendación más saludable que puedes tomar.