Así fue la primera Cumbre del Clima en 1972
Aunque no es hasta 1995 cuando Naciones Unidas crea oficialmente la COP (Conferencia de las Partes) donde se aborda anualmente de modo específico el cambio climático, se considera como primera gran Cumbre del Clima la cita organizada en Estocolmo por la ONU en 1972. La dirigió Maurice Strong, pionero de medioambientalismo, y al que vemos en bicicleta con motivo del encuentro.
En la imagen tenemos a Maurice Strong, comisionado de esta Cumbre del Clima de Estocolmo 1972, junto al entonces presidente de Naciones Unidas, Kurt Waldheim. Durante el mandato de Waldheim en la ONU nadie recordó su pasado pero en 1986, cuando aspiraba a presidir Austria, estalló el escándalo: había formado parte de una división de voluntarios nazis durante la II Guerra Mundial.
El Primer Ministro de Suecia, país anfitrión de la Cumbre, era en 1972 el socialdemócrata Olof Palme (en la imagen junto a Kurt Waldheim). Un líder de la izquierda mundial que en 1986 sería asesinado cuando le dispararon mientras volvía caminando a su casa después de ir al cine con su mujer. Iba sin guardaespaldas porque Suecia se consideraba una de las naciones más seguras del mundo.
En la década de los 70 del siglo XX a la gente común le preocupaba eso que se llamaba genéricamente "contaminación". El humo que asfixiaba las ciudades. Pero los científicos ya en esa década habían detectado que esos humos y otras acciones humanas estaban cambiando el clima, calentando el planeta.
La Cumbre del Clima (también denominada Cumbre de la Tierra) de 1972 contó con la participación de 120 países participantes. Estados Unidos e India estuvieron. En 2022 ambos países son, junto a China, los grandes ausentes de la COP27. En la imagen, Indira Gandhi con Olof Palme.
La conciencia ecológica había llevado a Naciones Unidas a convocar un encuentro global y también, ya desde los 60, movilizaba a los jóvenes. Frente al lugar de reunión de las delegaciones hubo protestas donde, al modo hippy, el desnudo formó parte de la escena.
La contaminación industrial había provocado en los 60 y 70 algunas catástrofes serias. En la imagen, una protesta durante la Cumbre de Estocolmo de afectados japoneses por la enfermedad de Minamata, provocada por los vertidos de mercurio en las aguas.
En realidad, de la Cumbre de Estocolmo salió una declaración de principios muy general: 26 puntos cuyo objetivo era "proteger y mejorar el medio ambiente para las generaciones presentes y futuras". En la imagen, el edificio donde se reunieron las delegaciones.
En aquel momento nadie se planteó que hubieran de reducirse las emisiones de CO2 ni cambiar los combustibles fósiles por energías renovables. Repitamos que todo era muy genérico. "Los recursos naturales de la tierra, incluidos el aire, el agua, la tierra, la flora y la fauna y especialmente muestras representativas de los ecosistemas naturales, deben preservarse en beneficio de las generaciones presentes y futuras" decía uno de los puntos aprobados.
Una curiosidad que quedó para la historia: Shirley Temple, que había sido estrella infantil de Hollywood, fue la representante de Estados Unidos en aquella cumbre climática pionera.
Aquella Cumbre de Estocolmo sirvió para poner en marcha mecanismos de vigilancia y que los estados se concienciasen. Pero la opinión pública tenía quizás otros focos de atención. Por ejemplo, la guerra de Vietnam. En la imagen, Jane Fonda en 1972 durante un acto de protesta contra la guerra en Estocolmo.
No obstante, Estocolmo supuso el primer paso de un largo camino y, sobre todo, institucionalizó la vigilancia científica de los riesgos medioambientales. De esta Cumbre nació el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA). ¿Y la siguiente cita? Pues tuvieron que pasar... ¡20 años!
La segunda gran Cumbre del Clima (o Cumbre de la Tierra) se realizó en Brasil. Fue en Río de Janeiro, participaron 172 países y de ahí partieron los trabajos que llevarían al Protocolo de Kyoto y los Acuerdos de París.
En Río de Janeiro, ya en los 90, el problema climático ya se percibía como algo verdaderamente grave. Y se comenzó a avanzar hacia medidas concretas para frenar el calentamiento global. En la imagen, el presidente francés François Mitterrand en la Cumbre de Río.
Maurice Strong repitió en la Cumbre de Río, y en la imagen se le puede ver con Mijail Gorbachov, líder entonces de una Unión Soviética que se pretendía renovar mediante la perestroika.
Aunque la estrella más popular de la Cumbre de Río en 1992 fue el comandante Cousteau, icono de la exploración y defensa de los océanos. En la imagen, Cousteau con el entonces presidente George Bush.
Después de Río se intensificó la labor de Naciones Unidas para llegar a acuerdos que nos permitan salvar el planeta de su destrucción medioambiental. La COP27 de 2022 es la culminación de un esfuerzo que comenzó en Estocolmo y, a la vez, evidencia lo urgente de acciones radicales para frenar el calentamiento. Cada vez tenemos menos tiempo. De hecho, ya ha habido consecuencias irreversibles.
Imagen: NASA
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