Rufián dice esto de 'La Roja' y ataca al PP
El portavoz de Esquerra Republicana en el Congreso, al ser consultado en los pasillos del Parlamento acerca de la propuesta del Partido Popular de detener la inmigración ilegal mediante el envío de buques de guerra a las costas africanas, sorprendió al defender a la selección española de fútbol, distanciándose del tema inicialmente planteado.
Rufián, cómo no, recurrió a Yamal y Nico Williams a modo de ejemplo de la España multicultural que mejora gracias a la inmigración.
"Si se aplicaran las leyes que quieren PP y Vox, los dos mejores de la selección española no estarían jugando y la selección no empataría ni con el Andorra" dijo Gabriel Rufián, según recogió 20 minutos.
La inmigración como tema de debate provocó así un inesperado elogio indirecto de Gabriel Rufián hacia la fortaleza deportiva de España.
La controversia comenzó cuando Alberto Núñez Feijóo sostuvo en una entrevista que menores migrantes están siendo conducidos por el Gobierno en aviones para dejarlos a su libre albedrío en barrios de toda España.
El líder del PP se lo dijo a Carlos Alsina en Onda Cero: "Como usted sabe, en las calles españolas están deambulando inmigrantes que el Gobierno mete en aviones y que después por la noche o a la hora que llegue el avión, los deja en determinados barrios, ciudades o lugares del territorio español".
Luego vino el portavoz del PP, Miguel Tellado (en la imagen), que no se caracteriza por su finura, y pidió en otra entrevista enviar barcos de guerra a perseguir cayucos en las costas africanas.
Concretamente, Miguel Tellado propuso, tal y como recogía el diario El Mundo: "El Gobierno puede disponer de las Fuerzas Armadas para defender nuestras fronteras, y desplegar una serie de embarcaciones que impidan que los cayucos que ponen en riesgo la vida de las personas que van en ellas salgan al mar y finalmente lleguen a nuestro país".
Santiago Abascal se molestó y recordó que Vox propuso primero lo de mandar al ejército a perseguir cayucos.
El PP parece haber olido la gasolina con la que está prendiendo el fuego del malestar social en toda Europa, donde los migrantes se convierten en chivo expiatorio y, a río revuelto (véase Francia), la ultraderecha pesca en abundancia.
Buen momento para utilizar la multicultural selección española como comodín para contraatacar a quienes ven en la inmigración un peligro terrorífico.
Sea como sea, el debate continuará. La presión en las fronteras de la inmigración ilegal es un problema real que hay que abordar. Otra cosa es que la solución sea mandar al ejército.
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