Irene Montero advierte así a un conocido presentador de televisión: "Basta ya"

Irene Montero, destacada líder de Podemos, ha dirigido una advertencia a Mediaset a raíz de un tratamiento que consideró inapropiado sobre la realidad trans en el programa 'Código 10', presentado por Nacho Abad en Cuatro, donde se percibió un tono sarcástico.

En el plató de 'Código 10' sentaron a Dani Gallardo, a quien presentaron como "mujer policía y trans no normativo". Añadían que "se denomina a sí misma mujer lesbiana porque le gustan las mujeres". A Irene Montero, actual eurodiputada y ex ministra de Igualdad, le pareció que el tono que se dio a esta asunto era de cachondeo y lanzó a través de X un mensaje.

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Irene Montero escribió: "Ridiculizar las realidades trans es transfobia. Los medios de comunicación tenéis la responsabilidad de no difundir odio, @mediasetcom . Si legitimáis reírse de las personas trans mucha gente que os ve creerá que ellos también pueden hacerlo en el trabajo o el colegio. Basta ya".

No ha habido (de momento) contestación por parte de Nacho Abad, que en su cuenta sí celebraba con repost el gran dato de 'Código 10' esta semana: un 7'2% de share. Tampoco ha dicho nada el copresentador David Alemán, también presente en plató.

La realidad es que, salvo para quien busque el espectáculo esperpéntico, lo que David Gallardo contaba de su situación personal sonaba a chiste grueso, a troleo en toda regla de una ley tan imporante como es la normativa que permite la diversidad sexual y de género.

Desde la lejanía de su trabajo de eurodiputada sigue Irene Montero muy atenta a la realidad española y, a su manera, liderando el espacio que es Podemos, disminuido pero todavía con su presencia en el Congreso y en la sociedad española.

En cuanto a Nacho Abad, no parece que jamás haya transitado muy cerca de las posiciones políticas de Irene Montero. Y como periodista de sucesos, al igual que muchos colegas, se encuadra en una defensa a ultranza de los cuerpos policiales, incluso en circunstancias inciertas.

Sea como sea, Irene Montero continúa activa y vigilante ante la transfobia, el machismo y otras lacras. Y su dedo acusatorio señala cuando cree conveniente.

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