Si Franco se hubiera presentado a unas elecciones

Muchas veces se plantea el debate sobre el apoyo social que tuvo Franco durante su gobierno autoritario. El único modo de saber si, de verdad, los españoles le querían como líder hubiera sido que se presentase a unas elecciones. Obviamente no sucedió. Pero ¿hubiera ganado en tal caso?

Durante la dictadura franquista, más allá de elecciones y consultas plebiscitarias de escasísimo nivel democrático, resultaba difícil medir el estado de la opinión pública. Pero a finales de los 60 y ya en los 70 surgieron las primeras empresas demoscópicas y existen algunas encuestas reveladoras.

En una encuesta de 1975 realizada pocos meses antes de morir Franco y citada por Alfredo Hernández Sánchez en su trabajo 'La opinión pública del franquismo a la democracia' se concluye que una mayoría de los españoles (32%) deseaban que todo siguiera igual. Pero, paradójicamente, sólo un 0'6% deseaban una dictadura militar. O sea, que el orden siguiera pero sin dictadura.

En esa misma encuesta de 1975 vemos que sólo un 25'3% de la población desea un "régimen democrático como en los países de Europa".

Otro detalle revelador que cita Alfredo Hernández Sánchez en su trabajo es lo que los españoles exigen mayoritariamente si se les da a elegir entre paz, libertad, justicia, etc.

Seguramente por el recuerdo de la terrible guerra civil, la paz es el concepto que prioritariamente creen los españoles que ha de preservarse, muy por encima de la libertad.

En marzo de 1975, según una encuesta publicada en la Revista Española de la Opinión Pública sobre las "metas y objetivos más importantes para la política", un 45% quiere "que en España haya paz" frente al muy minoritario 5% que quiere "que en España haya libertad".

Otro 5% quiere que "en España haya democracia". Otra minoría más en una encuesta en la que, sin embargo, la justicia es reclamada por 23%.

Las encuestas en una dictadura tienen un valor relativo (incluso contestar a un encuestador se hace con la prevención de quien no tiene una libertad total de expresión) pero apuntan a un clima de opinión en el que, quizá, Franco hubiera podido ganar unas elecciones.

Después de 40 años de dictadura la psicología de la sociedad española, no tanto entre la gente joven pero sí más allá, estaba dominada por el temor a otra guerra y Franco era la figura que, en principio, aseguraba que se evitaría algo así. Pero por debajo de esa querencia por la seguridad latía un anhelo de cambio...

Si la pregunta resultaba más directa (y sin elementos accesorios sobre paz, orden, etc), los españoles de finales del franquismo aseguraban que preferían la democracia.

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De hecho, una encuesta realizada en el verano de 1975 (y que también se reproduce en 'La opinión pública del franquismo a la democracia') desvela que un 46'3% de los españoles consultados cree que "la democracia es el mejor sistema de gobierno". Así pues, dependía de la encuesta y del modo de preguntar lo que se obtenía como respuesta mayoritaria.

La realidad es que Franco nunca se sometió a dictamen democrático alguno y que, tras su muerte, los más acérrimos franquistas, agrupados en la Fuerza Nueva de Blas Piñar (integrada en una plataforma ultraderechista denominada Unión Nacional) apenas logró un diputado en las primeras elecciones para quedar fuera del parlamento en las siguientes. Hasta que llegó Vox.

Y España, todavía con el temor a la guerra civil, escogió a un joven ex falangista, Adolfo Suárez, para pilotar la Transición. Paz, orden y libertad dentro de lo que cabe. Eso es lo que, poco a poco, dio a España el entonces líder de la ahora extinta UCD. Y funcionó.

ADEMÁS: Cómo sería España si Franco hubiera perdido la guerra civil