¿Tienes miedo a conducir? Se llama amaxofobia y es más común de lo que imaginas

Conducir no es algo sencillo, por mucho que miles de millones de vehículos circulen, a diario, por todo el mundo.

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Hay quienes tienen miedo a las grandes aglomeraciones de vehículos, a conducir de noche o a entrar en zonas céntricas de grandes ciudades, pero eso es más temor e inseguridad que otra cosa.

Luego están quienes se ponen delante del volante y, de repente, notan que les falta el aire, se lees acelera el pulso, les tiemblas las extremidades, incluso sienten dolores musculares. Estos síntomas delatan la amaxofobia, es decir, el miedo a conducir

Según cuentan en el RACE (Real Automóvil Club de España), la amaxofobia crea tal estado de ansiedad y nervios al conductor que le incapacita por completo para manejar un vehículo.

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En este caso, establecen tres grupos de personas las que, por lo general, se ven afectadas por esta enfermedad. En primer lugar, quienes se sacan el carnet de conducir pero abandonan la conducción tras dos años.

En segundo lugar, conductores habituales y experimentados que, de repente, comienzan a tener episodios de ansiedad.

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Y para terminar, aquellos conductores que han sufrido una experiencia traumática al volante. Experiencia que puede haberles ocurrido a ellos directamente o, sencillamente, haber sido testigos de la misma.

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Con esta premisa, la amaxofobia afecta convirtiendo la conducción en una amenaza, incapacitando al conductor a hacerse cargo del vehículo que, en algunos casos, llevan años conduciendo.

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Ante tal panorama, son dos las soluciones para tratar la amaxofobia: un curso de perfeccionamiento o, directamente, acudir a un especialista.

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Con los cursos de perfeccionamiento, el conductor mejorará su nivel de conducción pero, además, potenciará su autoestima y confianza al volante, con un profesional a su lado para reforzarle.

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En el caso del especialista, hablan de un psicólogo que combina técnicas de relajación con terapias de choque que impliquen, poco a poco, enfrentarse a las situaciones de tráfico que han generado el problema.

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Sea como sea, la amaxofobia es un problema que llega a afectar al 28% de conductores, según un estudio de la Fundación CEA (Club Europeo de Automovilistas). Lo bueno es que ahora ya sabes cómo se llama el problema y cómo darle solución, si eres parte de ese porcentaje.

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